Este pequeño cerro ofrece una vista sublime. Queda demostrado que la belleza escénica de una montaña no depende solo de su altura, aunque suene políticamente incorrecto: esta modesta cumbre supera la belleza de muchos peladeros altos del norte. El sendero está bien marcado, pero hay que tener cuidado con la bajada, ya que es muy inclinado y estrecho. Hay barro resbaloso. Llevar de todas maneras un par de bastones. Llama la atención no encontrar ni una sola basura. Que siga así.
Características de la montaña
Media Montaña
Ascenso precolombino
Acceso con restricciones